Beatriz y Ana se conocieron hace tiempo en Logroño.

Por eso, cuando sus caminos se volvieron a cruzar para compartir despacho, supieron que La Rioja, era un talismán para ellas.

Elegimos el Centro Riojano de Madrid, en pleno Barrio de Salamanca, como el espacio ideal para celebrar este encuentro en el que se reunieron pacientes y amigos para dar la bienvenida a su nuevo proyecto profesional: La apertura de su despacho en Vía Carpetana 147.

Esta nueva aventura, se centra en dos pilares fundamentales para ellas:

Crear un entorno acogedor, flexible y seguro para el paciente, y a la vez, un lugar donde el propio paciente aprenda a respetar y cuidarse dándose el valor que merece desde una posición jerárquica igual a la del terapeuta.

Ana y Beatriz buscan crear un espacio acogedor y libre de juicios desde la empatía y la honestidad; y el compromiso mutuo entre paciente y terapeuta, en el que poder expresar todas esas vulnerabilidades que a menudo escondemos.

El 24 de mayo se convirtió, gracias a un evento creado con mimo y plagado de detalles, en una mañana muy especial llena de emociones en la que pudimos hablar sobre la importancia de cuidarnos y de encontrar espacios de seguridad, disfrutar de una tarta exquisita elaborada especialmente para la ocasión y probar los deliciosos cafés de especialidad de Wolfox, ubicados en la Calle Pérez Galdós en Fuencarral, quienes nos acompañaron para que nuestros invitados pudiesen saborear la mañana con el mejor café de la ciudad.

Un espacio acogedor y libre de juicios creado desde la empatía y la honestidad